Glenn Miller “In the mood”

Consejo de Noya

Mientras, la fama de Santiago crecía en todo el mundo. Gente de todo el mundo peregrinaba al campo santo. El pueblo de Noya también participaba por su proximidad con Santiago y hacía de "puerto de Compostela". A principios del siglo XIV Rui Soga de Lobeira es señor de Noya y vive en el castillo del Tapal (frente a San Martín). Ayudaron al arzobispo Fr. Berengelde en la lucha que éste tenía con los burgueses compostelanos y Soga le premió con una muralla de piedra de 6 m de alto y con una iglesia extramuros, la iglesia de Santa María a Nova. En su cementerio se entierran los gremios de artesanos muertos. Se creó un hospital para enfermos y peregrinos y un lazareto para los enfermos de lepra. En esos años Noya era un muy importante pueblo comerciante.

Cementerio de Noya

Al lado de Santa Maria a Nova y presidida por esta se encuentra este curioso cementerio rodeado de las casas de la ciudad

Iglesia de Santa Maria a Nova, Noya

La iglesia de Santa María la Nueva, también llamada del Don, se sitúa en el centro de un cementerio, la Quintana dos Mortos, que según la leyenda, fue hecho con tierra traída de Palestina.

Fue construida por el arzobispo Berenguel de Landoira sobre otra iglesia más antigua y en el año 1327 se consagró. Pese a ser una obra tardía, puede decirse que es de estilo románico con influencias ojivales.

Iglesia de San Marin de Noya

Detalle de la Clave,  presidida por Cristo y los doce ancianos del apocalipsis con sus instrumentos.

Iglesia de San Marin de Noya

La portada principal es de gran belleza, en la parte superior hay un enorme rosetón. Los fustes de las columnas están adornados con las figuras de los doce apóstoles y la clave, está presidida por la imagen de Cristo rodeado por los doce ancianos del Apocalipsis con sus instrumentos. 

Iglesia de San Marin de Noya

San Martín o San Martiño de Noia se edificó en el solar donde estaba la ermita de Santa María por orden del arzobispo Lope de Mendoza, y en 1434 se concluyó.

Posee una sola nave con ábside pentagonal coronado por almenas que le dan aspecto de fortaleza. Las figuras de San Gabriel y de la Virgen se hallan en los costados. 

Muros, la Ria

Una gaviota volando sobre la Ria de Muros  y Noya

Consejo de Muros, Ayuntamiento

En marzo de 1809, en la Guerra de la Independencia española, la ciudad fue destruida por las tropas napoleónicas en doce horas. Además de los daños humanos y materiales (190 casas destruidas), se quemó el Archivo Municipal, que causó la pérdida de la mayoría de la documentación histórica. En el siglo XIX, llegaron a la aldea empresarios catalanes que crearon más de 30 fábricas de Salazón , especialmente sardinas y arenque. Junto con los astilleros, que han marcado la vida profesional y la fisonomía de la ciudad.